Pasear en bicicleta en las grandes ciudades es por lo general bastante complicado y puede llegar a ser hasta un poco peligroso o por lo menos así lo es en mi ciudad, pero a pesar de las cosas malas que podría ponerme a escribir en estos momentos para ti y que estoy seguro que si lo hago inmediatamente comenzarías a pensar que andar en bicicleta en Jalisco es salir a sobrevivir a la selva de asfalto, no todo es malo en mi ciudad y debo de reconocer y aceptar que hicieron una propuesta o tuvieron una idea bastante atinada.
Todos los domingos a partir de las 8:00 de la mañana hasta las 2:00 de la tarde una de las principales avenidas como lo es avenida Vallarta es cerrada en su totalidad al tránsito vehicular, dejando libre esta avenida tan importante para la ciudad a los peatones, ciclistas, mascotas y cualquier otra persona que decida recorrer esta avenida sin importar como lo haga, por supuesto siempre y cuando no sea en un vehículo motorizado.
Poder recorrer esta avenida sin tener el miedo de ser atropellado por un carro es algo que posiblemente consideres un poco insignificante o no le tomes mucho sentido, pero poder pasearte tranquilo y poder apreciar de esta avenida hasta llegar al monumento más representativo como lo es la minerva, justo eso es lo que le da valor, ya que puedes llegar justo a la glorieta de la minerva, tomarte fotos y estar tranquilamente en este monumento que en cualquier otro día, sería imposible poder llegar a la mitad de la glorieta.
Casi todos los días paso por esta avenida lo cual hace que poco a poco vaya perdiendo un poco de interés, pero sobre todo al recorrerla en automóvil pierdes la oportunidad de apreciar los pequeños detalles, como el hecho de que nunca me había percatado de cuan larga es y que no es tan fácil como suele ser en el carro, también no quiero decir que es el recorrido más extremo y complicado que puedas recorrer en tu vida montado en una bicicleta, en el momento que lo hice, me percaté de que la avenida se encuentra de subida todo el trayecto hasta llegar a la glorieta, en una bicicleta tus piernas se percatan de cuan empinada y larga es esta avenida que parece inofensiva.
El camino, se vuelve muy ameno y agradable al ver la gran variedad de personas que pasa de diferentes maneras, o con mascotas, y que pueden provocarte una sonrisa. Por supuesto si te gusta y sabes andar en bicicleta no puedes dejar pasar la oportunidad de jugar carreras, de emocionarte tratando de andar lo más rápido posible o de cualquier otra cosa que se te venga a la mente y como no hacerlo si no todos los días tienes la oportunidad de tener una avenida tan grande a tus pies.