Recuerdo muy bien el día que decidí irme a Canadá, estaba aburrido de todo, la U, mi familia, mi ciudad, todo me parecía inútil. Hasta que por unos amigos escuché sobre la Working holiday, una visa donde puedes estar un año trabajando o de vacaciones. Trabajé y en un año pude reunir el suficiente dinero para viajar, postulé a la visa y en 2 meses la respuesta llegó, estaba todo listo para mi viaje.
Llegué a Toronto, una ciudad muy grande, la ciudad era muy ordenada y limpia, me sorprendía todo lo que veía, la gente, las calles, los árboles, todo. Pero aun no terminaba mi viaje, había decidido ir a Vancouver ya que unos amigos que conocí en la U Vivían ahí y ofrecieron ayudarme. Decidí ir a Vancouver en bus, recorrí Canadá de un extremo al otro, fue hermoso. Conocí osos, ciervos y alces, los cuales me maravillaban cada vez que los veía en la carretera. pude ver en esos 3 días como cambiaban los paisajes, el verde estaba en todas partes, era increíble.
Vancouver fue genial, una ciudad gigante con un mar hermoso, llegué en la tarde y pude dejar mis cosas donde mi amigo y salir con él. La noche es muy distinta, aunque estaba muy helado la gente estaba muy acostumbrada a eso. Los grados bajo cero no eran excusa y la vida nocturna se vivía en todas partes. Después de unas semanas viajamos a la Isla de Vancouver, llegamos a Victoria y decidí quedarme a vivir ahí, me ofrecieron un trabajo simple, solo tenía con una maquina limpiar el piso de un supermercado 4 noches por semana, y con eso podía vivir tranquilamente.
Recorrí mucho en Canadá, las experiencias, lugares, la comida, era maravilloso. Todo ahora tenía sentido, había encontrado algo que podia despertar esas ganas de seguir. Un año pasó rápido, pero lo aproveché al máximo, viajé por muchos lugares hermosos y conocí una cultura de respeto y amabilidad como nunca había visto en mi vida. Ahora en Chile, me puedo dar cuenta como cambie, como mi perspectiva de la vida había cambiado y como todo cambió acá mientras yo no estaba. Espero pronto poder volver a ese hermoso país del que tuve la suerte de vivir por un año.