A todos nos ha pasado alguna vez que nos hemos pillado soñando despiertos con un viaje maravilloso y lleno aventuras, porque después de todo ¿a quién no le gusta viajar? Algunos buscan lugares selváticos como el Amazonas, quieren ir a la playa en Miami y también están aquéllos que buscan y sueñan con conocer el viejo continente impregnado de historias, guerras y miles de turistas el año completo. Todos hemos querido viajar a comer pastas a Italia, a tomar cerveza a Bélgica y algunos más exigentes hemos querido cenar en la Torre Eiffel.
Pues así me pasó a mi en Marzo. Emprendí vuelo hasta la capital de Francia, París, donde los turistas con sus mapas abundan por montón, el Río Sena está desbordado de los conocidos "botes mosca" (bateau mouche), Notre Dame toca sus campanas y sus gárgolas vigilan desde lo alto, y además la diversidad cultural y de idiomas parece transformarse en un zoológico. Desde orientales hasta estadounidenses, desde América Latina hasta la África misma.
Alojamiento
Comencé mi aventura llegando a mi hostal, Le d'Artagnan, que pertenece a una fundación a nivel de albergues para estudiantes. Buena comida, excelente ambiente, piezas compartidas y lo mejor, es que en las habitaciones no hay wifi porque la idea principal es conocer gente y conversar con tus compañeros de pieza. El personal me pareció tan agradable como el bar subterráneo y su sala de cine, además, con una estación de metro a una cuadra, ¿qué más se puede pedir?
Recorriendo los hitos
Siguiendo en la aventura, París es una ciudad llena de escondites que visitar, el Arco del Triunfo, el Museo Louvre, el Carrusel del Louvre, los Campos Eliseos, Versalles, el Jardín de las Tullerías, el Palacio Real, Notre Dame, y por supuesto, la majestuosa Torre Eiffel. Por 12 euros puedes conocer a la famosísima Gioconda o "Monalisa" como quieran llamarle, los departamentos de Napoleón, el salón de Miguel Ángel y muchas obras llenas de historia, en el museo Louvre. Pagando 9.50 euros subes a lo más alto del Arco del Triunfo para saludar a la Torre Eiffel a la distancia. Por 8.50 euros subes las torres de Notre Dame, es decir, sus 402 escalones y tienes la perspectiva perfecta del Río Sena junto a las gárgolas.
Mención especial: Notre Dame
Te recomiendo comprar dos bolsitas de pañuelos desechables. Una para cuando entres a Notre Dame. Sus altos techos, sus paredes llenas de mosaicos y su aire impregnado de historia te remecerán hasta la última fibra, sobre todo si está sonando música; ahí quedarás perplejo. El segundo paquetito es para cuando vayas a la Torre Eiffel tipo 7 de la tarde y enciendan sus luces. Quedarás tan anonadado que podrías mirarla horas enteras y su majestuosidad (por mucho que sea una torre) te hará sentir una hormiga llena de felicidad. Lo mejor es que ese maravilloso espectáculo es gratis, a menos de que quieras subirla, pero yo con ver eso, me di por pagada.
Para enamorados
Si están profundamente enamorados y andan con su pareja, amante, amigo con ventaja, esposa, pololo, o lo que sea, ir a poner un candadito al Puente de Las Artes. Ese que siempre ponen en las películas románticas y que se usa para sellar el amor hasta siempre y por siempre, está en el lindo París, y caminar a través de él, te permite ver la hermosura que el Sena tiene para mostrarnos.
Extra tips
Por último te entrego como dato, que si quieres ir a conocer el Palacio de Versalles debes tomar un tren "RER", pues el palacio queda lejos, en uno de los extremos de la ciudad y debes guardar un día completo por lo menos para estar allá. El link para que reserves tu ticket de tren está aquí: http://www.paris.es/rer
Investiga el monumento que visitarás:
Existen varias páginas con información en español para que conozcas y recorras París. Antes de cada visita puedes visitar el sitio e informarte acerca de los horarios, tarifas y un poco de historia. Por ejemplo a mi me fueron muy útil estás páginas: Notre Dame yTorre Eiffel