Si te dicen Kiwi lo primero que piensas es en la fruta: café y peluda por fuera, con pepitas y verde por dentro, cítrica, muy cítrica cuando no está madura. Puede que también te acuerdes del pájaro kiwi, de actividad nocturna, que no puede volar y que lamentablemente está en peligro de extinción. Y si es que eres bueno en historia y geografía recordarás que “kiwi” es el gentilicio más común para los habitantes de Nueva Zelanda, el tercer país más grande de Oceanía después de Australia y Papúa Nueva Guinea.
Nueva Zelanda está conformada por dos islas (norte y sur) y posee paisajes maravillosos. Estos mismos paisajes los podrás haber visto películas como “El Señor de los Anillos”, “El Hobbit” (por supuesto), “La lección de piano” (o El piano) y algo modificados en “Avatar”. Interesante, ¿no?
En mi estadía en este país he podido comprobar con mis propios ojos que cada uno de sus rincones está cubierto por un manto de pasto de un verde inigualable, digno de wallpaper de Windows XP. También hay innumerables reservas naturales y nacionales con senderos muy bien señalizados y miradores que te dejan sin aliento. Más al sur encontramos grandes montañas, lagos y playas paradisiacas de arena blanca y aguas color turquesas pero que enfrían tu temperatura corporal en un abrir y cerrar de ojos.
No puedo hablar de Nueva Zelanda sin hablar de su gente. La población está distribuida entre Kiwis (de ascendencia inglesa), Maoris (pueblo originario), variedad de asiáticos, isleños del resto del pacífico, gente de India y Bangladesh además de unos cuantos latinoamericanos.
La cultura maorí es muy valorada en el país (incluso cuando no son mayoría), por tanto, aún se conserva elpropio dialecto y la gente maorí y no maorí que lo conoce lo practica cada vez que se puede. Donde quiera que vayas también encontrarás nombres de lugares en maorí, tallados (Pouwhenua), casas de reuniones (marae), barcos de metros y metros de longitud (waka, con los que ellos llegaron a New Zealand desde la polinesia) joyas confeccionadas con Pāua (concha de la zona de un aspecto calipso tornasol) y con Green Stone. No hay que extrañarse tampoco si ves a un maorí tatuado, incluso si es en su cara porque es algo común acá. Sin ir más lejos, cuando una mujer maorí queda viuda se tatúa su mentón. Este tipo especial de tatuajes es llamado Tā moko.
Por último, en esta breve introducción de New Zealand debo contarles de la pasión deportiva que existe. Si bien es cierto conocen poco de fútbol, son muy hinchas del rugby, cricket y netball, siendo el primero el que tiene más adeptos y el que llena estadios para ver el espectáculo que dan los All Blacks (equipo nacional de rugby) deportivamente hablando y también con una danza maorí, llamada Haka, que realizan al comenzar cada encuentro, la cual proviene de un ritual previo a una pelea entre tribus maorís (o con invasores) que busca intimidar al enemigo realizando variados gestos con el rostro, dando golpes en brazos, piernas y pecho y cantando a la vez una impactante arenga. Te dejamos un video si te quieres impresionar al igual que yo en el estadio.