La Pedrera es un pequeño balneario en la costa de Rocha, Uruguay, al que se llegamos sin problemas en bus desde Montevideo. Es un lugar que se adapta a lo que busquen los viajeros: en el centro hay bares y restoranes, donde te encuentras con bastante gente en verano - en especial jóvenes – que disfrutan de la playa, el sol y el relajo, mientras que a un par de kilómetros hacia el este está el sector de Santa Isabel, ideal para quienes buscan tranquilidad.
Ahí nos alojamos en la casa de un rumano que se enamoró de Uruguay y decidió establecerse aquí, armar un hospedaje sencillo pero acogedor, y vivir en comunidad. Aquí no hay televisores, se cuida la luz (proveniente de paneles solares) y el agua, y logramos desconectarnos de todo. Nunca había tenido la oportunidad de ver luciérnagas: aquí, todas las noches, veía por montones.
La ubicación de La Pedrera nos permitió visitar por el día lugares como La Paloma y Cabo Polonio, un balneario súper popular hasta donde llegan mochileros de todos lados. Para quienes tengan planes de relajo, es mejor visitar el Cabo sólo por el día, ya que además hay transporte hasta cerca de las 20:00 horas hacia La Pedrera, incluso directo a Montevideo.
De nuestra estadía rescato la posibilidad de realmente descansar. Al principio nos costó acostumbrarnos al sonido de los cientos de grillos entre los árboles, sin embargo, hace tiempo que no lograba desconectarme tanto. La hospitalidad uruguaya merece un capítulo aparte. De todos modos me gustaría volver.
Imagen CC Rafael Alvez
Imagen CC Rodrigo Sepulveda
Imagen CC Rodrigo Sepulveda