Patrimonios de la Humanidad UNESCO: la Gran Muralla China

Conocer la Gran Muralla China era un sueño desde que era chica, ya que su fama es global y sus postales traspasan los continentes. Lo que yo no sabía es que hay varios circuitos que pueden realizarse, algunos más turísticos que otros.

Esta fortificación china tiene una extensión de más de 20000 kilómetros y data del año 200 a.C., aproximadamente. Sin lugar a dudas es un lugar que debes tener en tu lista antes de morir, pues se respira historia.

Fui con mi hermana y decidimos hacer el circuito Mutianyu (más hacia el medio), que se encuentra a 95 kilómetros de Beijing. Optamos por este trayecto porque no era muy empinado y porque no es el más turístico (Badaling es el que más turistas recibe).

Decidimos ir por nuestra cuenta, ya que los tour son algo caros, así que tomamos una micro y partimos. El viaje dura aproximadamente 2 horas (va parando en el camino) y hay que subir unas cuantas escaleras para poder llegar a la parte de la Muralla o puedes tomar un teleférico. La verdad es que pensamos que sería más difícil llegar, pero sólo nos costó encontrar el lugar de donde partía el bus y luego llegamos sin dificultades.

Este Patrimonio de la Humanidad según la UNESCO mide aproximadamente 6 metros de alto y 4 de ancho y está muy bien conservado. Hay muchas partes que han sido reconstruidas, pero aún se puede apreciar los rasgos antiguos de esta fortificación.

Estando arriba uno se imagina los soldados y guerreros que cuidaban esta fortificación durante la dinastía Ming y es realmente impresionante, ya que es imponente, es enorme, y uno no logra entender cómo lograron hacer esta fortificación hace tantos años.

Yo recomiendo el circuito Mutianyu porque en verdad no son muchos los turistas que van. A diferencia de Badaling, esta parte de la Muralla no está tan restaurada y es fácil recorrerla, pues no te topas cada 2 minutos con personas tomando fotografías.

Una vez que terminas el circuito pasas por varios puestos locales en donde puedes comprar souvenirs. Una vez más, les recomiendo regatear, porque puedes sacar grandes precios si es que no aceptas el primero que te ofrezcan.

Si quieres un circuito un poco más desafiante, puedes hacer el Simatai, que es de trekking, pero debes estar en una muy buena condición física ya que es el circuito más difícil de la Gran Muralla y el menos restaurado. Este trayecto dura aproximadamente 5 horas.