Cuando pienso que pronto iré nuevamente a Bariloche, sé que veré cerros nevados, un majestuoso Nahuel Huapi, calles acogedoras con muchos perros San Bernardo, pero lo que más me gusta realmente de ir a esta ciudad, es que disfrutaré de uno de los chocolates más ricos del mundo.
Y no es por exagerar, pero Bariloche cuenta con los chocolates más refinados del mundo, tiene una larga tradición en el mercado y en sus chocolaterías podrás encontrar toda clase y tipos de chocolate: en rama, bombones, rellenos, con frutos secos, diferentes diseños, etc ¡Qué hambre que me da escribir esta nota!
La primera fábrica se instaló el año 1947, por la familia Fenoglio, compuesta por maestros chocolateros de Italia, quiénes comenzaron esta tradición y luego se sumaron muchas más, convirtiendo a Bariloche en una ciudad de chocolate.
A continuación les comentaré cuáles según mi criterio, cuáles son los templos imperdibles del cacao en esta ciudad.
Chocolates del Turista: Son un clásico de Bariloche, vienen directamente de Los Alpes y fueron creados por Benito Cecco, maestro italiano. Al comienzo fueron una empresa familiar, pero hoy son una de las fábricas más importantes de Argentina. Destacan por sus más de 200 variedades, donde están los chocolates en ramas, trufas, bombones, chocolate en taza, alfajores, conitos, dulces artesanales, entre otros. Además cada año exportan toneladas de chocolate, por lo que en diferentes partes del mundo disfrutan de este verdadero manjar.
Benroth : Son conocidos por ofrecer chocolate gourmet, utilizando elaboraciones con las mejores materias primas, según sus propios dueños. Poseen un gran variedad de chocolates rellenos con y sin licor, tabletas, bocaditos, bombones, turrones y alfajores.
Mamuschka : Su nombre viene de las muñecas rusas que se introducen la una con la otra, simbolizando el amor y la amistad, que es lo que los creadores de está fábrica quieren entregar a través del chocolate. Esta clásica muñeca está ubicada en la esquina de las calles Mitre y Rolando, en pleno centro de la ciudad. En esta tienda no solo encuentras chocolates, además disfrutarás de almendras rellenas, mazapán casero con amaretto, praliné, el famoso Timbal, bombones rellenos con licor como whisky Jhonnie Walker o Licor de Crema Bailey’s, turrones, tabletas, entre otros. Un gran placer culpable.
Rapa Nui: Fue creada por los hijos de la familia Fenoglio, quiénes siguieron realizando el arte del chocolate, pero además se dedicaron a la confitería, donde los postres, helados y pasteles también son protagonistas. Actualmente sus productos también se exportan a diferentes partes de Argentina.
Abuela Goye: Los locales de la Abuela Goye también son un clásico de Bariloche y nace de una familia de inmigrantes, fundadores de la “Colonia Suiza”, quiénes trajeron las mejores recetas de chocolate, las que fueron mezcladas con la tradición y la elaboración criolla, transformándose en un referente en la Patagonia. En sus tiendas podemos encontrar chocolates, bombones, bañados, alfajores, dulces y frutas al natural, repostería, tortas y helados.
Como bonus y pese a que la tienda “Fenoglio”( la primera chocolatería de Bariloche), fue vendida a Havanna, les recomendamos que asistan al “Museo del chocolate Fenoglio”, donde de forma didáctica podrán ver la historia del chocolate, cómo se fabrica y se sorprenderán con figuras de animales de tamaño real hechas de chocolate.
¡Qué disfruten de esta nota y recuerden que un rico chocolate de Bariloche siempre es un buen regalo!